Campañas de comunicación para romper el tabú de la soledad no deseada
Tenemos más medios para comunicarnos que nunca. Sin embargo, la soledad no deseada ya es un problema mundial. Una pandemia silenciosa que, como los trapos sucios, se lavan en casa.
¿Te imaginas una red social donde las personas expresen abiertamente sus sentimientos de soledad? Impensable, ¿cierto? Este es solo uno de los motivos por los que, hasta que podamos hablar con naturalidad de la soledad no deseada, necesitamos campañas de comunicación para normalizar y visibilizar un sentimiento que todo el mundo experimenta en algún momento de su vida.
¿Qué es la soledad no deseada?
¿Conoces la diferencia entre la soledad de, por ejemplo, una persona que se ha retirado a un lugar recóndito y la de alguien que vive en una gran ciudad? Quien se aísla a conciencia disfruta de una soledad buscada, a la que puede poner término cuando lo desee. En cambio, la persona que se sabe rodeada de iguales pero se siente sola, no es capaz de dar los pasos que la saquen de esa situación.
«Yo no estoy sola, pero puedo tener un momento de mi vida soledad». Así lo expresaba Cati, voluntaria del Proyecto Crece de Cruz Roja en uno de los vídeos para la campaña de comunicación que hicimos desde Implícate.
Mediante este proyecto innovador, Cruz Roja apuesta por un modelo de intervención comunitaria que fortalece las redes de apoyo y cuidados para prevenir la institucionalización y potenciar la desinstitucionalización de las personas en situación de dificultad social.
Pero la soledad no deseada puede afectar a personas de cualquier edad y contexto. Se trata de un sentimiento subjetivo, que no tiene que ver con la cantidad de interacciones sociales, sino con la calidad de las mismas. Puedes sentirla cuando tienes menos relaciones de las que te gustaría o porque las que tienes no te ofrecen el apoyo emocional que necesitas.
La soledad no deseada, un problema de salud pública
¿Sabías que la Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene tan claro que la soledad no deseada es una amenaza para la salud que ha creado una Comisión sobre Conexión Social?
El aislamiento social impuesto durante la emergencia sanitaria del COVID-19 puso de manifiesto la necesidad de estrategias para afrontar esta problemática, que desde entonces no ha hecho sino aumentar. Por eso, no es casualidad que en los programas europeos diseñados para reparar los daños económicos y sociales causados por la pandemia de coronavirus esté tan presente.
Y no, no se trata sólo de salud mental. No tener suficientes relaciones sociales aumenta las probabilidades de sufrir accidentes cerebrovasculares. Es más, ya se cree que conlleva un riesgo de muerte prematura mayor que cosas como el tabaquismo, el sedentarismo, la obesidad o el consumo excesivo de alcohol.
Una comunidad para hacer frente a la soledad no deseada
¿Has sentido alguna vez o conoces a alguien que sienta soledad no deseada? Esta era una de las cuestiones que planteamos en las entrevistas para nuestros microdocumentales del Proyecto Crece de Cruz Roja.
Pronto descubrimos que, ante una pregunta tan directa, la mayoría de las personas no responde afirmativamente. La soledad no deseada muchas veces se vive como un fracaso: algo estaré haciendo mal cuando no consigo establecer vínculos. Pero la realidad es que se trata de un problema con un amplio componente estructural y sistémico.
Hacer comunidad: la importancia de los vínculos comunitarios
Podemos tener una red de relaciones más o menos extensa, ¿pero qué ocurre cuando el contacto con ellas es cada vez más difícil? Tal vez nos hemos mudado a otra ciudad, o las obligaciones de unas personas y otras nos dejan sin tiempo o, simplemente, sin energía. Aquí es donde entra en juego el sentido de comunidad.
Participar en la vida de las personas de nuestro entorno más próximo no sólo nos permite aumentar la frecuencia de las interacciones sociales, sino que también nos proporciona un sentimiento de pertenencia, de estar integrados y formar parte de algo. Nuestras redes comunitarias nos brindarán su apoyo y nos darán la oportunidad de ofrecer el nuestro, mejorando nuestra vida y la de nuestras vecinas y vecinos.
Fomentando los vínculos comunitarios reducimos la soledad no deseada, construimos comunidades más fuertes y resilientes, donde cada persona tiene su lugar, participa y aporta.
Cuidados de la base comunitaria como herramienta para la desinstitucionalización
Es evidente que, llegado el caso, la mayoría preferiríamos seguir viviendo en nuestra casa, en nuestro entorno, gestionando nuestros horarios y estilo de vida, antes que en una institución. En determinadas circunstancias de vulnerabilidad, esto sólo es posible con apoyos domiciliarios y comunitarios. No hablamos solo de la familia o los amigos, sino de una sociedad que se involucre: comerciantes, vecinas y vecinos que se cuiden entre sí, asociaciones e instituciones públicas y privadas. A través de nuestra campaña de publicidad para el proyecto Reforzando Vínculos de Cruz Roja, aportamos nuestro granito de arena en sensibilizar sobre la importancia de nuestro papel para construir este modelo de sociedad. Reforzando Vínculos que busca impulsar una comunidad que apoye a las personas mayores en su autonomía y prevenir la soledad no deseada. Darla a conocer a la sociedad a través de piezas creativas e inspiradoras ha sido la labor de Implicate, y no podemos sentir más orgullo.
Comunicar es hacer comunidad
Si indagas en los orígenes de la palabra «comunicar», descubrirás que hace referencia a poner en común, compartir y, en definitiva, a originar una “communitas”. Porque una parte importante de construir una comunidad es construir su narrativa. Un relato en el que todas las personas que forman parte de ella se sientan reflejadas.
Si queremos generar nuevos modelos de comunidad, tenemos que mostrarlos y hacerlos deseables. Necesitamos sensibilizar sobre problemáticas sociales concretas, como la soledad no deseada. Visibilizándola podemos contribuir a su desestigmatización, de modo que quien la padezca no tema pedir ayuda y quien la presencia sepa reconocerla y pueda actuar.
Por eso en los vídeos para el Proyecto Crece de Cruz Roja, a través del mensaje “Hagamos comunidad”, apelamos al compromiso y a la participación, a la idea de mejorar como sociedad avanzando en los cuidados y la atención.
Nos encanta apoyar proyectos tan necesarios como estos y aportar lo que mejor sabemos hacer como agencia de comunicación social en Madrid. ¿Quieres saber en qué más andamos estos últimos meses? En Proyectos puedes ver algunas de nuestras últimas campañas.